miércoles, 13 de junio de 2012

¿Por qué CANCIONES CON(de) CORAZ(i)ÓN?

Lucía Bailón plasma en este montaje la imagen que rodea al EP CANCIONES CON(de) CORAZ(i)ÓN de Diego Stabilito & The Sundance Kid. Una propuesta musical tan poco convencional y poco "comercial" a priori, que incluye temas que cargan con más de 80 años de historia y han estado sonando proyectados desde giradiscos hasta i-Pods, no podía contar con una imagen al uso y costumbre. El concepto de corazón, que surge desde el momento de la elección del título del trabajo, fue un aspecto recurrente a lo largo de todo el proceso. Los temas, a pesar de su edad, han resistido tan bien el paso del tiempo que ahora mismo, en estos tiempos de crisis, no sólo económica, mantienen su actualidad plenamente. Asistimos a una situación en la que muchos claman por una nueva revolución, y por tanto, no hay nada mejor que refleje esa pasión que el motor por excelencia, el corazón humano, también representación tradicional de los sentimientos. Por ello la portada lo muestra en toda su crudeza anatómica, en una imagen clínica que busca jugar con la repulsión y la fascinación. La fuente tipográfica es la empleada anteriormente por una famosa firma multinacional de muebles que, sin entrar a valorar, a dotado de uniformidad a todos los hogares del planeta, dentro de la globalización económica rampante que nos ha poseído. Y el resultado de los colores, efectivamente, evoca a la bandera española. Con la ventaja de que si se quema un disco de Diego Stabilito & The Sundance Kid uno no termina siendo juzgado ni por la Audiencia Nacional ni por el Supremo o el Constitucional.

En la contraportada, junto a los títulos, viajan en el papel una cita de Diego Stabilito que de un modo irónico trasmite la esencia del disco, la voluntad de que los temas rsulten medicamento para las mentes de todos, víctimas de tamaño despropósito planetario, y un dibujo del propio autor tremendamente visceral.

El resultado continúa con la presentación de los discos de apopkephe, que tienen la voluntad de ser vinilos en miniatura, con ese toque artesanal en el que cada corazón de la etiqueta interior es único.

Dentro, el trabajo de producción de David Martín, de Blancosound, en colaboración con los dos artistas, aúna magistralmente ese carácter de la antigua escuela propio de los temas con las nuevas posibilidades técnicas y sonoras.

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